Las FUERZAS
BOLIVARIAS DE LIBERACIÓN este 23 de septiembre del año 2012 conmemoran el 20 aniversario
de la realización de la OPERACIÓN DIGNIDAD, la cual marca el inicio de su
accionar público después de largos años de silenciosa y clandestina
organización.
La referida operación, como es suficientemente conocido por el pueblo venezolano, consistió en la ejecución de una acción ejemplarizante contra uno de los principales integrantes de la corrupta y despatriada clase política que, por aquellos años (1.992), gobernaba el país; acción político-militar que recayó en la persona de ANTONIO RÍOS, presidente de la CTV y símbolo irrefutable de la generalizada práctica de corrupción que en perjuicio de la moral social, el erario público y los interés de la nación, impunemente se desarrollaba en todo el entramado institucional de la república.
A 20 años de aquella legitima operación, las FBL afirman categóricamente que la corrupción no ha sido exterminada como criminal práctica de acumulación de capital por parte de ciertos sectores gobernantes, de oposición, banqueros prófugos y empresarios, en detrimento del patrimonio público; por el contrario, su persistencia en la actual realidad nacional se ha convertido en una franca amenaza contra la continuidad del proceso político en marcha, al extremo que cercena todas sus potencialidades para garantizar el tránsito hacia una patria soberana, independiente y socialista, en la que la honrada y transparente administración de los intereses y derechos de la nación constituya una de sus principales virtudes.
A pesar a todas las críticas y diferencias con la actual gestión gubernamental, las FUERZAS BOLIVARIANAS DE LIBERACIÓN hacen parte de las amplias mayorías populares que este 7 de octubre votarán a favor de la reelección del Presidente Chávez, pues como organización Comunista está convencida de que la posibilidad de impulsar cambios en la realidad venezolana actual se debate a lo interno de la Revolución Bolivariana, independientemente de que ésta aún se desenvuelva en el marco y la lógica del régimen de producción capitalista, dado que este nuevo intento de proceso revolucionario significa y representa para el pueblo oprimido, explotado y excluido, la esperanza de instaurar un nuevo orden social, en el que la protección a la vida y a los bienes de toda la ciudadanía; la promoción y defensa de los derechos humanos; la decencia pública y la transparencia administrativa; la desmercantilización del trabajo humano, la preeminencia de los intereses y derechos del colectivo social; el desarrollo del aparato productivo nacional; en fin, la construcción del socialismo deje de ser una mera retórica y actividad propagandística para convertirse verdaderamente en hechos concretos y reales.
En este contexto y en víspera de la elección presidencial, las FBL le proponen a todas las organizaciones que integran el movimiento popular y revolucionario del país la intensificación de las tareas organizativas en defensa de la voluntad del pueblo expresada mediante el sufragio, ante el inminente riesgo de que para desconocerla, los sectores burgueses opositores al gobierno provoquen y desarrollen acciones que violenten el vigente orden constitucional. En ese sentido, se deben tomar todas las previsiones para capturar a sus principales agentes; atacar con fuego hasta incinerar totalmente todos sus intereses económicos, o sea, sus bancos, empresas de transporte y comercialización, medios de comunicación, compañías nacionales y trasnacionales dedicadas a la actividad petrolera y minera, etc. Ninguna propiedad de la vieja y nueva burguesía comercial podrá quedar ilesa. Todas y todos a ejercer el poder popular para avanzar en el saneamiento de la sociedad venezolana.
¡¡¡Proletarios del Mundo, Uníos!!!
¡¡¡Honor y Gloria a nuestras Heroínas y Mártires!!!
¡¡¡El capital es inflamable, echémosle candela!!!
Equipo de Conducción Nacional de las FBL
La referida operación, como es suficientemente conocido por el pueblo venezolano, consistió en la ejecución de una acción ejemplarizante contra uno de los principales integrantes de la corrupta y despatriada clase política que, por aquellos años (1.992), gobernaba el país; acción político-militar que recayó en la persona de ANTONIO RÍOS, presidente de la CTV y símbolo irrefutable de la generalizada práctica de corrupción que en perjuicio de la moral social, el erario público y los interés de la nación, impunemente se desarrollaba en todo el entramado institucional de la república.
A 20 años de aquella legitima operación, las FBL afirman categóricamente que la corrupción no ha sido exterminada como criminal práctica de acumulación de capital por parte de ciertos sectores gobernantes, de oposición, banqueros prófugos y empresarios, en detrimento del patrimonio público; por el contrario, su persistencia en la actual realidad nacional se ha convertido en una franca amenaza contra la continuidad del proceso político en marcha, al extremo que cercena todas sus potencialidades para garantizar el tránsito hacia una patria soberana, independiente y socialista, en la que la honrada y transparente administración de los intereses y derechos de la nación constituya una de sus principales virtudes.
A pesar a todas las críticas y diferencias con la actual gestión gubernamental, las FUERZAS BOLIVARIANAS DE LIBERACIÓN hacen parte de las amplias mayorías populares que este 7 de octubre votarán a favor de la reelección del Presidente Chávez, pues como organización Comunista está convencida de que la posibilidad de impulsar cambios en la realidad venezolana actual se debate a lo interno de la Revolución Bolivariana, independientemente de que ésta aún se desenvuelva en el marco y la lógica del régimen de producción capitalista, dado que este nuevo intento de proceso revolucionario significa y representa para el pueblo oprimido, explotado y excluido, la esperanza de instaurar un nuevo orden social, en el que la protección a la vida y a los bienes de toda la ciudadanía; la promoción y defensa de los derechos humanos; la decencia pública y la transparencia administrativa; la desmercantilización del trabajo humano, la preeminencia de los intereses y derechos del colectivo social; el desarrollo del aparato productivo nacional; en fin, la construcción del socialismo deje de ser una mera retórica y actividad propagandística para convertirse verdaderamente en hechos concretos y reales.
En este contexto y en víspera de la elección presidencial, las FBL le proponen a todas las organizaciones que integran el movimiento popular y revolucionario del país la intensificación de las tareas organizativas en defensa de la voluntad del pueblo expresada mediante el sufragio, ante el inminente riesgo de que para desconocerla, los sectores burgueses opositores al gobierno provoquen y desarrollen acciones que violenten el vigente orden constitucional. En ese sentido, se deben tomar todas las previsiones para capturar a sus principales agentes; atacar con fuego hasta incinerar totalmente todos sus intereses económicos, o sea, sus bancos, empresas de transporte y comercialización, medios de comunicación, compañías nacionales y trasnacionales dedicadas a la actividad petrolera y minera, etc. Ninguna propiedad de la vieja y nueva burguesía comercial podrá quedar ilesa. Todas y todos a ejercer el poder popular para avanzar en el saneamiento de la sociedad venezolana.
¡¡¡Proletarios del Mundo, Uníos!!!
¡¡¡Honor y Gloria a nuestras Heroínas y Mártires!!!
¡¡¡El capital es inflamable, echémosle candela!!!
Equipo de Conducción Nacional de las FBL
Venezuela, 23
de septiembre de 2012
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